UROS – AMANTANI – TAQUILE 2D 1N

Islas De Uros – Amanti – Taquile
Los isleños están dedicados a la textilería y el pastoreo, resumiendo en el encanto de la vida con la naturaleza, destacan los trabajos artesanales de los nativos los cuales persisten con su vestimenta clásica. En Amantaní al igual que en la isla de Taquile no hay hoteles ni restaurantes, la comida y el alojamiento es proporcionada por los isleños en sus propios hogares. Desde lejos se vislumbran los andenes antiguos, construidos en tiempos precolombinos. En la isla se puede admirar sitios sagrados de las culturas preincaicas Pukara, Lupaka y la cultura Inca. Hasta mediado del siglo XX la isla fue tierra de hacendados. Al fin, después de varias sublevaciones, el pueblo de Amantaní logró expulsar a los terratenientes para tomar posesión de las tierras las cuales eran trabajadas por ellos. Actualmente viven alrededor de 4000 personas en la isla. En su mayoría son campesinos, que hablan su lengua nativa quechua y castellano. Al igual que sus antepasados viven en casas de adobe y se dedican a la crianza de ovejas y a la agricultura. En los innumerables andenes cultivan papa, oca, cebada y “el cereal de los Incas” la Quinua. Esta isla de Amantaní es pacífica y bella como la isla de Taquile pero de mayor extensión, en la cima de sus cerros más altos existen dos templos “Pachatata” y “Pachamama”, desde aquí la vista del lago más alto del mundo impone su maravilla ante los ojos del mundo. Aún se encuentran numerosos vestigios arqueológicos incluso centros de adoración y culto; así como hermosos tejidos elaborados por los comuneros.